domingo, 20 de enero de 2013

El Tranvía en Linares - El Transporte Urbano.

El tranvía de Linares comenzó su caminar en 1899, por la visión de futuro de D. Antonío Conejero Sánchez, empresario de Linares, que entre otras cosas, construyó la chimenea de la fundición La Cruz, esta construcción por aquella época, llegó a ser la obra de más altura de la provincia de Jaén.
Linares crece al amparo de la explotación de la cuenca minera de Linares-La Carolina, la pequeña población andaluza, debido a este auge de la minería e industria de transformación del plomo,  hace que de los 6.643 habitantes de 1850 pase a tener  los 38.945 habitantes del año 1900. 
El tranvía se construye por la necesitad de acercar el plomo de la mina, a las fundiciones y al ferrocarril, y al minero a la mina, ya que los poblados que crecen alrededor de la explotaciones mineras, carecen del atractivo que ofrece la joven ciudad con sus cafés, tabernas, casinos y demás lugares donde gastar "la paga".
Será el  proyecto del tranvía eléctrico, la nueva forma de energía por entonces. El primer ramal construido fue el que va desde Linares a la mina de San Roque, con varias paradas en las distintas concesiones mineras de la zona, después se continuara con un nuevo trazado de Linares a la fundición de plomo La Tortilla.
Después se construirán cuatro nuevos ramales, tres de ellos unirán las tres estaciones de ferrocarril situadas en el casco urbano, la estación de Andaluces, la de Almeria y la de Madrid o de la MZA y un nuevo ramal desde Linares a la fundición San José.  Con ello nace el transporte urbano en la ciudad de Linares.
El Sr. Conejero participara también en la construcción del tranvía de la Loma, uniendo la ciudad de Úbeda, La Yedra y Baeza, con la estación de Linares-Baeza y el empalme con Linares.

Corría el año de 1902, cuando un grupo de empresarios franceses ligados económicamente a Linares, deciden reunirse y constituir el día 28 de Noviembre, la Compañía de Electricidad  y de Tracción en España. Esta reunión se celebra en París, en el despacho del notario Monsieur Grange y deciden comprar la compañía de tranvía existente ya en Linares.  Se crea con un capital social de dos millones de francos y repartidos en acciones. Don Antonio Conejero, vende la concesión  a la Compañía de Electricidad  y de Tracción en España. en agosto de 1904.

En los felices años veinte del pasado siglo, el entramado del tranvía se amplia al resto de la cuenca minera, incluso existió un el proyecto de ampliar el tramo de la loma a las poblaciones de Villacarrillo y Villanueva del Arzobispo, proyecto de Armando Plasman director de la compañía en esa época, pero al final no llegó a realizarse.
La crisis minera al final de los años veinte afectó a este medio de transporte y la Compañía de Electricidad  y de Tracción en España, cede la concesión a la Compañía de Tranvías de Linares S.A, en 1932, pero la actividad de la nueva compañía dura poco, en septiembre de 1934, Explotación de Ferrocarriles del Estado, incauta la explotación del tranvía en el nombre del Estado.

En la década de los sesenta, una nueva crisis de la minería, más agresiva genera una fuerte emigración de la población de Linares, por que desaparecen la mayoría de las explotaciones mineras, se cierran estaciones urbanas de Andaluces y Almería, el tranvía se queda sin usuarios, y sin la gran razón de su existencia, el tranvía desaparece, siendo el último día en servicio el 15 de enero de 1966. Fué sustituido por las lineas de autobuses urbanos que a día de hoy, recorren la ciudad.

Hemos dado un paseo en autobús por la ciudad, nos hemos apeado en la Avenida de Pozo Ancho,a la altura del numero 5 de esta avenida, es la ubicación de un conocido establecimiento gastronomico, el "Mesón Campero", ,  hemos decido entrar  y tomar unas "cañas".

Este establecimiento nos permite degustar su estupenda cocina "tapeando" o tomando unas raciones de "picoteo", ya que ahora tienen una zona destinada para ello.

De primero nos han ofrecido a probar unos canelones de rabo de toro, después nos hemos decido a pedir unas colas de langostinos al jerez, seguidos de uno huevos "rotos" con longaniza y patatas a lo "pobre", codillo de cerdo en salsa de naranja, solomillo al wisky y terminado con unas milhojas de paté de perdiz.