Hoy en nuestra ruta por la ciudad de Linares (Jaén), conocida entre otras cosas por sus bares, tabernas y mesones, pero sobre todo por sus tapas y pinchos que sirven en estos locales y que son un obsequio que el establecimiento acompaña con la copa.
Nos hemos encaminado a pasear por la zona del antiguo hospital de "San José y San Raimundo", situado en la Avenida y Paseo de los Marqueses.
En el testamento de los marqueses se establece la donación de dinero para la construcción y el mantenimiento de un hospital, así como un asilo, el lugar elegido, el paseo de su nombre. Es una construcción de estilo neo - gótico. Su inauguración oficial que fue en 1911, se detectan grandes defectos de construcción, que impiden que sea puesto en servicio. En 1912 comienzan las obras de adecuación, que durarán mas que la propia construcción del edificio. Esto causa una gran polémica ya que se produjo un gasto bastante significativo de los fondos dejados en el testamento de los marqueses.
En 1917 el edificio queda terminado, pudiendo trasladar a los enfermos y el material de hospital, del antiguo hospital situado en el edificio del convento de San Francisco.
También en el testamento de los marqueses, estaba claro que en la capilla del hospital que ellos donan a la ciudad, tendría que haber una cripta, donde se debería construir un panteón para recoger sus restos.
Esta obra se le encarga al escultor Callaut Valera. Será una de sus mejores obras realizas fuera de Sevilla.
En la actualidad el hospital se ha rehabilitado, una parte esta destinada a centro de salud, otra a residencia de mayores de la tercera edad y la capilla, cripta y unas salas anexas a museo, es un lugar para visitar, que merece la pena ver.
En el, hay varios espacios definidos: uno dedicado al ornamento religioso, otro la capilla del hospital, además de la cripta donde reposan los restos mortales de los Marqueses, unas salas dedicadas a la medicina de principios del siglo XX y la ultima de ellas dedicada a la muerte del torero Manuel Rodríguez "Manolete", gravemente herido en la plaza de toros de Linares y fallecido en este hospital.
Este hospital al igual que en el Palacio de Linares (Casa de América), que está situado en la plaza de Cibeles de Madrid, no esta exento de una leyenda sobre fantasmas y fenómenos extraños. Se comenta que en alguna ocasión se han oído ruidos extraños sin conocer su procedencia.
En el testamento de los marqueses se establece la donación de dinero para la construcción y el mantenimiento de un hospital, así como un asilo, el lugar elegido, el paseo de su nombre. Es una construcción de estilo neo - gótico. Su inauguración oficial que fue en 1911, se detectan grandes defectos de construcción, que impiden que sea puesto en servicio. En 1912 comienzan las obras de adecuación, que durarán mas que la propia construcción del edificio. Esto causa una gran polémica ya que se produjo un gasto bastante significativo de los fondos dejados en el testamento de los marqueses.
En 1917 el edificio queda terminado, pudiendo trasladar a los enfermos y el material de hospital, del antiguo hospital situado en el edificio del convento de San Francisco.
También en el testamento de los marqueses, estaba claro que en la capilla del hospital que ellos donan a la ciudad, tendría que haber una cripta, donde se debería construir un panteón para recoger sus restos.
Esta obra se le encarga al escultor Callaut Valera. Será una de sus mejores obras realizas fuera de Sevilla.
En la actualidad el hospital se ha rehabilitado, una parte esta destinada a centro de salud, otra a residencia de mayores de la tercera edad y la capilla, cripta y unas salas anexas a museo, es un lugar para visitar, que merece la pena ver.
En el, hay varios espacios definidos: uno dedicado al ornamento religioso, otro la capilla del hospital, además de la cripta donde reposan los restos mortales de los Marqueses, unas salas dedicadas a la medicina de principios del siglo XX y la ultima de ellas dedicada a la muerte del torero Manuel Rodríguez "Manolete", gravemente herido en la plaza de toros de Linares y fallecido en este hospital.
Este hospital al igual que en el Palacio de Linares (Casa de América), que está situado en la plaza de Cibeles de Madrid, no esta exento de una leyenda sobre fantasmas y fenómenos extraños. Se comenta que en alguna ocasión se han oído ruidos extraños sin conocer su procedencia.
Sombras y algunas luces se han encendido o apagado solas, pasos sin que nadie estuviera cerca, cámaras fotográficas donde solo aparecen destellos, pero la verdad a nosotros no nos a ocurrido nada.
En la cripta, existe una imagen de San Raimundo, su aspecto impone e incluso algún visitante al verla se le pone la piel de "gallina".
Terminada la visita decidimos tomar unas cañas y así comentar lo visto, decidimos acercarnos al mesón "La Tertulia", situado en el 106 de la Avda. de España. Este mesón ha marcado un antes y un después en la gastronomía Linarense, dándole un toque personal.
Una de las cosas que más gusta, es que todos los días nos sorprenden con una tapa o pincho fuera de carta, como esta de gambón con caviar y ensalada rusa , pero siempre encontraras los huevos "rotos" con "papas a lo pobre" y gulas, esta es la tapa denominada de "la casa" o por que no unos chorizos al vino con aromas de sierra. Esto y muchas cosas más que salen de las manos del Chef Antonio Villar Gamboa..
Terminada la visita decidimos tomar unas cañas y así comentar lo visto, decidimos acercarnos al mesón "La Tertulia", situado en el 106 de la Avda. de España. Este mesón ha marcado un antes y un después en la gastronomía Linarense, dándole un toque personal.
Una de las cosas que más gusta, es que todos los días nos sorprenden con una tapa o pincho fuera de carta, como esta de gambón con caviar y ensalada rusa , pero siempre encontraras los huevos "rotos" con "papas a lo pobre" y gulas, esta es la tapa denominada de "la casa" o por que no unos chorizos al vino con aromas de sierra. Esto y muchas cosas más que salen de las manos del Chef Antonio Villar Gamboa..
Establecimiento que invita a volver tanto por su cocina como por el trato personal que dispensa a sus visitantes, hemos hablado con él y nos ha comentado de su cocina :"Mi misión es halagar su apetito, no regularlo".- Antonio Villar Gamboa